lunes, 24 de noviembre de 2008

Luces y claroscuros

Mbote, bandeko.

En el claroscuro de la alborada, caminando y haciendo camino… se intuye la senda de lo que está brotando.

El otro día estuve en un Centro para la Formación Escolar y Profesional de Menores de la Calle. Me encantó estar allí. Es un centro que depende de las Teresianas del P. Poveda y me sedujo la implicación y el espíritu de las personas que trabajan allí. El director nos acogió de maravilla (a Sympho y a mí) y nos fue explicando el funcionamiento y la finalidad del centro.

Actualmente hay casi unos cien menores en fase de seguimiento, de los cuales más de sesenta viven allí en régimen de internado. Todos ellos son chicos. Por las mañanas se les acompaña a la escuela y por las tardes se les apoya escolarmente. Para los más mayores hay talleres de formación de zapatero y de electricidad. Tienen un pequeño huerto que les ayuda a disminuir los gastos de comida. Las mujeres del barrio vienen para colaborar y algunas aprovechan para aprender a coser. Son los mismos niños los que distribuyen las distintas responsabilidades del centro: limpieza, trabajo, deporte…

La finalidad del centro es la inserción del niño en su familia y, si resulta imposible, al menos habilitarle para la inserción laboral. Así, se le enseña un oficio y se le da una ayuda económica para que pueda empezar a trabajar. Cuando cumple 18 años tiene que salir del centro y afrontar el mundo laboral.

Los problemas más significativos son de reconstrucción de su universo relacional, motivacional y que sean conscientes que salir de la calle puede depender solamente de ellos mismos. El director nos comentaba que uno de los problemas nocturnos son los abusos sexuales que los niños han aprendido en la calle, sobre todo cuando hay grupos nuevos cuesta bastante que se adapten y los más grandes se aprovechan de los más pequeños.

Me pareció precioso el trabajo que está haciendo esta gente en este centro. Además están en coordinación con muchos otros centros que están trabajando en el mismo sentido en Kin. De hecho, hay una plataforma que reagrupa a todos y que organizan sesiones de formación de los educadores. Para mí, fue como una luz en medio de Kin.

Ya veremos lo que me deparará el futuro pero lo cierto es que me gustó este tipo de presencia y lo vi muy en consonancia con esas “grandes palabras” que los misioneros de la Consolata empleamos en nuestros documentos cuando hablamos de “optar por estar presentes en las periferias urbanas”.

De todas formas, la prioridad todavía para mí es la lengua: el lingala. Es la lengua corriente de estos niños y hay que dominarla bien porque además emplean un argot propio de la calle. En fin, yo voy un poco lento en este sentido. Aunque hay una señora que me ayuda y viene cuatro días por semana para “forzarme” a estudiar. El problema sigue siendo que casi siempre encuentro otras prioridades antes que el estudio de la lengua. Y luego, cuando reviso mi empleo del tiempo, me fastidia que… ¡el día no tenga 30 horas!

Quería compartiros esto porque he recibido muchos correos en los que me escribíais preocupados por mí y por la situación del país. Como ya escribí el otro día. Ya las grandes agencias de prensa han desplazado sus corresponsales y ya hay las ansiadas imágenes de desplazados, muertos y combate. ¡Qué pena que no se movilizaran hace un año para prevenir lo que se veía venir!

En este tiempo, hubo la Cumbre de Nairobi II para intentar llegar a un acuerdo de paz en el que se vieron las caras Kagame y Kabila. Todos se hicieron bonitas fotos y una bella declaración por la paz. La Cumbre estaba muerta antes de empezarla, así que no es que haya cambiado mucho el panorama.

Después, Obasanjo se fue a hablar con Nkunda y éste ha prometido un cese de las hostilidades. Aquí, en Kin, casi nadie cree a Nkunda. Pero el problema es que la mayoría tampoco cree a Kabila e incluso dicen que puede estar de acuerdo con lo que está pasando. La gente está defraudada de Kabila porque no se pronuncia, no denuncia, parece que estén atacando otro país que no sea el suyo. La verdad es muy duro tener representantes que se pasan el día recibiendo embajadores y diplomáticos y misiones del FMI, la BM y la ONU.

El 15 de este mes, se cumplieron 100 años del traspaso del “Estado Independiente del Congo” del dominio del rey Leopoldo II al gobierno de Bélgica. Me llamó la atención que no hubo manifestaciones públicas de este aniversario, ni discursos, ni referencias. Sin embargo, en 1908 supuso todo un cambio para el pueblo tras la política explotadora (yo diría, genocida) de Leopoldo. Los excesos del rey Leopoldo II desencadenó una de las primeras movilizaciones humanas internacionales del siglo XX, abanderada por los Estados Unidos e Inglaterra. Los barcos de Amberes partían llenos únicamente de soldados y armas y volvían llenos de marfil y caucho. Los soldados de Leopoldo tenían que regresar con las manos cortadas de los indígenas abatidos para justificar los cartuchos que faltaban. Esta barbarie y el continuo derrumbe demográfico lo llamó Adam Hoshchild el “genocidio olvidado”.

El Congo había sido dirigido como una gran hacienda privada y Bélgica quiso recuperar el tiempo perdido deteniendo la “política de las manos cortadas” e invirtiendo en la colonia. Así, el Congo entraba en la economía mundial y si en 1908 aportaba el caucho de los primeros coches occidentales; después contribuirá con el cobre para la fabricación de fusiles y blindados durante la Primera Guerra Mundial; más tarde aportará el uranio para la fabricación de la primera bomba atómica; y seguirá contribuyendo con el cobalto, el oro, el diamante, la tantalita, la casiterita, el coltán…

Hace cien años y hoy también.

Por cierto, si me permitís una sugerencia literaria. Regalaos el último libro de Alberto Vázquez Figueroa, se titula “Coltán” y creo que será una buena preparación para celebrar una Navidad “otra”.

La memoria ayuda a comprender el presente y a prever el futuro, así como nos da raíces y consistencias.

Un abrazo de este pueblo que no se merece lo que está sufriendo.

Ramón.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

De nuevo guerra en el Congo

Mbote, bandeko.

Parece que ahora volvemos a ser noticia y ni tan siquiera las elecciones norteamericanas conseguirán desbancar Goma de nuestras pantallas. Sí, ya lo hemos conseguido, la razón es sencilla: ya tenemos las imágenes sabrosas de desplazados y vagabundos que tanto nos conmueven. Todo esto se veía venir desde hace tiempo pero… se necesitan las imágenes conmovedoras para que todo el mundo se mueva.

Supongo que sabéis que tenemos dos conflictos encendidos: uno (conocido ya por todos), en Goma; y el otro, conocido sólo por los que van más allá en Dungu (al extremos nordeste del país en la frontera con Sudán y Uganda.

Empiezo por este último. El protagonista es el LRA, algo así como la "Armada del Señor", un movimiento guerrillero que se opone al gobierno de Uganda y que lleva diez años haciendo atrocidades en el norte de Uganda. Este movimiento tenía su base de apoyo en el sur de Sudán pero después de los últimos acuerdos de paz en Sudán entre el norte y el sur, están buscando crear un cinturón de seguridad donde establecerse. Y parece ser que este se encuentra en Dungu. El 1 de noviembre, el LRA entró en Dungu y no tenemos más noticias. Este grupo es mitad movimiento guerrillero, mitad secta fundamentalista que quiere gobernar Uganda tomando como base los diez mandamientos. Bueno, creo que "no matarás" no debe estar en la lista que tienen ellos.

De este conflicto no se habla mucho a nivel internacional. Supongo que porque no hay tantas riquezas como entorno a Los Grandes Lagos. Los Misioneros de la Consolata tenemos una misión a 23 km. de Dungu y, por el momento no tenemos noticias de ellos. Tienen una radio con la que poder transmitir pero hay que ser muy prudentes porque si el LRA la capta, vendrían para confiscarla y entonces quedarían completamente incomunicados.

La otra guerra en acto es la que se está desarrollando en Goma. Aquí hay muchos intereses en juego y voy a intentar traduciros un buen resumen que encontré de Colette Braeckman, la corresponsal en África de "Le Soir" , un periódico belga.

· Louis Michel, comisario europeo de ayuda humanitaria: ha conseguido que Kabila y el primer ministro belga consigan restablecer las relaciones. Asimismo, ha conseguido que Kabila y Kagame (presidente de Ruanda) vayan a Nairobi a la Cumbre para el Pacto de la Estabilidad de los Grandes Lagos.

· Bernard Kouchner, ministro francés de asuntos exteriores, y David Milliband, ministro británico de asuntos exteriores, han estado en Kinshasa, Kigali y Goma. Kouchner no podía ir solo porque no hay relaciones diplomáticas entre Ruanda y Francia. Y, sin embargo, la Gran Bretaña es el principal apoyo de Ruanda (790 millones de dólares durante cinco años), ya que este país quiere entrar en la Commonwealth y ha cambiado el francés por el inglés en la enseñanza secundaria. Además, los británicos son uno de los países que más ayuda envían también al Congo, por lo que su influencia en la región ha crecido considerablemente en detrimento de la Francia y de Bélgica (tras el encontronazo entre Kabila y el ministro belga de asuntos exteriores, Karel de Gucht). Los emisarios europeos han insistido en la importancia de aplicar los Acuerdos de Nairobi que preveían el desarme y el repatriamiento de los combatientes Hutus de las FDDR (Fuerzas Democráticas por la Defensa de Ruanda). Ellos apoyan el programa "Amani", adoptado en la Conferencia de Goma de enero de 2008 que respondía a las reivindicaciones Tutsis y preveía el desarme de todos los grupos armados.

· La Unión Europea quiere reforzar la MONUC en vez de enviar una fuerza europea. De hecho, Ruanda no aceptaría el despliegue de tropas francesas aunque fuera bajo la bandera de la Unión Europea, y también los alemanes se habían opuesto. Sin embargo, Milliband a afirmado que el envío de una fuerza militar europea (para asegurar la ayuda humanitaria) no está excluido. Al mismo tiempo, la UE está preparando la Cumbre de Nairobi para que Kabila y Kagame estén presentes.

· La negociación política con Nkunda tendría que tocar los siguientes aspectos: la seguridad de los Tutsis congoleses, el desarme de los combatientes Hutus, la normalización de las relaciones entre el Congo y Ruanda dentro de lo que sería la "Comunidad Económica de Países de Los Grandes Lagos" (Ruanda, Burundi y Congo). La CEPGL posibilitaría la cooperación en materia de energía hidroeléctrica y la explotación de gas metano del lago Kivu (que ya ha comenzado en la parte ruandesa). También preconizaría la libre circulación entre los tres países.

· Karel de Gucht ha agradecido a Kagame su "influencia moderadora" ejercida sobre el general Laurent Nkunda (la cabeza visible del movimiento guerrillero).

· Los rebeldes de Nkunda han tomado el control de Rutshuru han establecido su administración desafiando a las autoridades legales. Por nada del mundo quieren una fuerza europea en la zona. Este grupo armado sigue el ejemplo de la armada ruandesa que, en 1996, había atacado los campos de refugiados hutus à Kivu forzando su retorno a Ruanda: ellos están haciendo lo mismo en los campos situados en torno a Rutshuru. Así, los Tutsis retornan a Ruanda y los otros desplazados huyen por la selva, lejos de la ayuda humanitaria.

· Laurent Nkunda se presenta como el defensor de los Tutsis congoleses y quiere el retorno de los refugiados que viven en los países vecinos (lo que ya fue aceptado en la Conferencia de Goma a condición de que el ACNUR proceda a su identificación); exige el desarme de las FDLR que a menudo combaten junto a las fuerzas gubernamentales del Congo. Pero también quiere discutir de igual a igual con Kabila "la independencia del Kivu" y no acepta el programa Amani (que él mismo había aceptado en enero en la Conferencia de Goma).

· Kabila ha aceptado encontrarse con Kagame y la Asamblea Nacional, bajo la batuta de su presidente, Vital Kamerhe, ha elaborado un "plan para salir de la crisis" que prevé un "diálogo político y militar" con el movimiento de Nkunda, la normalización de relaciones con Ruanda y una verdadera reforma de las fuerzas armadas.

· El gobierno congolés, que acaba de tomar posesión teniendo como primer ministro Muzito, rechaza negociar directamente con Nkunda.

· Los países amigos del Congo son Tanzania, cuyo actual jefe de estado, Jakaya Kikwete, es el presidente en ejercicio de la Unión Africana; Angola, Namibia y el resto de países del África Austral. Hervé Morin, el ministro francés de la Defensa, ha confirmado los contactos de Francia con Angola para que tome un papel relevante en la solución de esta guerra. De hecho, la inminencia de una intervención angoleña explicaría todo este baile diplomático europeo en la región.

· En Goma, acaba de entrar en vigor un cese al fuego decretado unilateralmente por Nkunda. La policía congoleña y los cascos azules patrullan la ciudad. Pero la ONU sólo dispone de 6000 hombres en la zona, por lo que no es posible que pueda frenar el avance de Nkunda si decide atacar. El 30 de octubre ha habido mucho pillaje en la ciudad y se han censado por el momento 18 muertos.

· ¿A quién aprovecha esta guerra? Proverbio de la región: "No Nkunda no job". Los intereses están repartidos: los oficiales gubernamentales malversan fondos públicos y se construyen lujosas casas; las ONGs internacionales piden más fondos y sus contrapartes locales se aprovechan de estos proyectos; la MONUC pide que se refuerce su presencia; los comerciantes rebeldes tutsis seguirán exportando tranquilamente el coltán (necesario para la fabricación de móviles); los Hutus seguirán extrayendo y comercializando los minerales de la zona; los políticos seguirán con su retórico de palabrería vacía; Gran Bretaña y Estados Unidos seguirán ejerciendo más poder en la zona; Bélgica y Francia intentarán recuperar terreno; y China seguirá mejorando sus contractos de extracción de minerales a cambio de unos cuantos kilómetros de carretera, algunos dispensarios y escuelas y algún que otro pozo, sin importarle lo más mínimo los derechos humanos de las personas.

Espero haber aclarado un poco todo este follón. En Kin, la gente está harta de Nkunda y… de Kabila. Dicen que ya se ha pasado el tiempo de negociar y que lo que tiene que hacer Kabila es acabar con la rebelión. Ya se habló mucho en Goma en enero y ahora estamos en las mismas. Pero, claro, con la falta de disciplina de las fuerzas armadas congoleñas, con soldados que no son pagados y que tienen que robar para ganar algo, es difícil organizar una fuerza que se oponga a Nkunda.

Yo creo que este pueblo no se merece tanto sufrimiento y me temo que durante unos cuantos meses volveremos a ser noticia, probablemente llegarán a firmar acuerdos pero dudo que se cumplan. El Congo ha sido definido como un "escándalo geológico" y su riqueza es lo que le hunde en la miseria. Demasiados países buscan minerales preciosos en este mundo dominado por la electrónica y en el que el coltán tiene un valor estimable.

Ya veremos que nos deparará mañana.

Intentad denunciar tanta hipocresía y tomad parte en este mundo reduciendo el consumo de móviles y demás mercadotecnias.

Un abrazo fraterno en la Mesa de la Palabra, la Historia y el Vino.

Ramón.